En medio del avance en la tecnología, es necesaria la aclaración de términos como «fabricación aditiva» e «impresión 3D».

El termino «aditivo» hace referencia a la metodología utilizada por las impresoras 3D, es decir la «adición» de capas. El filamento, sea PLA, TPU, ABS, PETG, etc. se adiciona capa a capa y de ahí el concepto de «fabricación aditiva».

Cabe destacar que este tipo de fabricación o construcción de piezas se realiza con calor, agregando una fuente de calor al filamento, este se derrite (variando las temperaturas de fundición entre ellos, dependiendo de sus características) y luego se envía a través de un extrusor, que permite crear la pieza ya que se enfría en dicho proceso.

El proceso es complejo y simple a la vez, la lógica nos ayuda a comprender el funcionamiento de las impresoras en 3D, que aún tienen mucho más para aportar.

Ahora bien, con respecto a las piezas de indumentaria, el termino aditivo, al menos en el tipo de prendas que Diseniadoras.com enseña a crear, queda un poco exagerado, ya que para otorgar flexibilidad a las piezas, no hay demasiada adición, es decir cantidad de capas, al ser diseños que en su mayoría parten de los ejes X e Y y no en Z, lo que seria la altura.

La mayoría de los diseños para moda e indumentaria, en términos generales, no supera los 0,5mm. o 1 mm. de altura, es decir tendrán muy pocas capas añadidas.

Por ello es que decimos impresión 3D de piezas para prendas, y no impresión aditiva, termino generalmente utilizado para la industria y fabricación de productos materiales.

Cuando se presentan desafíos es cuando el diseño mas debe estar presente, para buscar alternativas y opciones con las herramientas que tiene, hacemos el mejor diseño cuando logramos avanzar una situación inconveniente y evolucionar un producto creando algo del modo más eficiente y creativo posible, que cubra la necesidad y haga un uso óptimo de los recursos, tiempo, materiales, estructura.

En ese sentido, Diseniadoras.com se enorgullece de haber creado los «conectores» desarrollando desde la etapa del diseño, una solución (costuras tradicionales) a la limitación del área de impresión de las impresoras 3D actuales, las cuales no superan los 20 o 30 cm.

Seria ideal que las empresas entendieran esta necesidad y desarrollaran impresoras con camas, áreas de impresión que superen los 50 cm. al menos, sin embargo hasta que eso suceda, o sean reemplazadas por impresoras mediante robótica, directamente en 3D y sobre maniquíes, habrá que seguir utilizando el ingenio, diseño y desarrollando prototipos que incluyan «conectores» para cubrir esa necesidad en forma de rompecabezas.

En cuanto a los materiales disponibles haciendo una comparación con la industria textil, la impresión 3D aun tiene mucho que desarrollar, sobre todo en filamentos, para brindar mayores cualidades en cuanto a la elasticidad (bastante lograda por ahora con proveedores españoles como Recreus Industries S.L. o Sakata 3D Filaments ) textura, resistencia, etc. Características de los tejidos tradicionales y que aún la industria de la impresión 3D no ha logrado emular, pero seguramente en un futuro lo hará.

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